Aprender a escuchar

Esta es la historia de Mercedes y Belén, dos personas que se han encontrado gracias al voluntariado, y que entorno a sus encuentros semanales han construido una relación fantástica con una confianza casi familiar.

Debido a la situación actual, estos encuentros se han sustituido por llamadas telefónicas que Belén cumple rigurosamente cada dos días.

Todo empezó cuando Belén Garrido, ingeniera de profesión, decidió reincorporarse a la Asociación de Voluntarios de ”la Caixa” en septiembre de 2018. Sin más ánimo que el de desconectar de su estrés diario, contactó con la Delegación de Sevilla para ofrecer su tiempo y su disponibilidad. Su perfil indicaba que era una buena candidata para el proyecto Final de Vida y Soledad, un programa para el que no todo el mundo está preparado, ya que además de hacer compañía a personas que están muy solas, también hay que acompañarlas, en muchos casos, en los últimos meses de vida. 

Por suerte, para Belén, el caso de Mercedes era diferente. Sí, es una persona mayor “como una abuela para mi”, con dificultades en la movilidad y en la vista, pero con mucha vitalidad, como la define Belén. Durante todo este tiempo sus reuniones han sido semanales y nunca han durado menos de dos horas. Se encuentran en casa de Mercedes y pasean hasta el supermercado, la farmacia y charlan, sobre todo charlan, “porque si algo necesitan las personas mayores es hablar, sentirse escuchadas y escuchar”. Y tienen muchas cosas que contar: “Me ha enseñado a cocinar, pero también me ha enseñado a respetar a las personas mayores, porque son una fuente de inspiración y conocimiento”, dice contundentemente. 

Cuando todo esto pase, las personas que han estado solas en sus casas necesitarán apoyo, entonces el tiempo de los voluntarios será de gran ayuda.

Belén Garrido

En estos días se llaman cada dos días “hablamos de la actualidad pero también de nuestra historia. Creo que soy como una nieta para ella”, confiesa con alegría. “Me da miedo que enferme y por eso ya hace dos semanas que no voy a verla”. Belén lanza un mensaje, para cuando acabe todo esto: “las personas que han estado solas encerradas en sus casas 24 horas 7 días a la semana necesitarán apoyo, será entonces cuando será de gran ayuda el tiempo de los voluntarios. No olvidemos que nuestros mayores tienen muchas cosas que enseñarnos”.